miércoles, 9 de julio de 2008

Alrededor de Junio del 2005 un grupo de amigos de Argentina decidió que sería una buena idea elegir un día para celebrar, homenajear y compartir el arte que todos disfrutaban más: la historieta.

Pero el Día de la Historieta debía celebrarse en una fecha que fuera significativa para el medio, de modo que para decidirlo, formaron la Comisión Pro Día de la Historieta (C.P.D.H.) que al cabo de muchas discusiones decidió cuál sería el día más adecuado.

La C.P.D.H. eligió el 4 de Septiembre porque en esa fecha, en 1957, llegaba a los kioscos Hora Cero Semanal. En aquella revista con guiones de Héctor G. Oesterheld los chicos de la época disfrutaron de las aventuras del oeste de Randall the Killer (con dibujos de Arturo del Castillo), las amargas historias de guerra de Ernie Pike (dibujadas por Hugo Pratt) y una aventura como no se había visto nunca, en parte bélica, en parte ciencia-ficción y que ocurría a la vuelta de la esquina. Esa historieta -que dibujaba con lujo de detalles Francisco Solano López- se llama El Eternauta.

Celebrar el Día de la Historieta significa tratar de invocar ese momento dorado de creación y de pasión. Cada 4 de septiembre será el día ideal para regalar historietas (todo tipo de historieta), para adornar las comiquerías y kioscos, para buscar con nuestra imaginación nuevas formas de festejar un arte que nos gusta disfrutar y también compartir.
 
Ir Arriba